Cuando surgen los problemas puede ser difícil conducir una reunión de vecinos. Desde Administraciones Atocha os dejamos unos consejos para presidentes y juntas directivas, que puede que os ayuden a resolver los problemas de vuestra comunidad.
Cambia la perspectiva. La fuente de cualquier discusión va condicionada por situaciones difíciles, en determinados casos, que no podemos analizar de forma independiente porque la convivencia deja a veces sin resolver pequeñas rencillas que saltan como un resorte en cuanto llega la oportunidad para hacerlo y, además, condicionado por el estado de ánimo del momento.
En las discusiones las personas, por medio de razonamientos mal planteados, nos sentimos retadas y lo convertimos en un “tú o yo”, una lucha de egos, sin tener en cuenta, de manera objetiva, cuál es la mejor perspectiva dentro de las circunstancias.
Es fundamental atacar el problema, no a la personas, si queremos solucionar un conflicto.
Cambia los Problemas por las Posibilidades por medio de lo que llamamos preguntas y res - puestas creativas, teniendo en cuenta a quién tenemos enfrente, cuáles son sus necesidades y sus preocupaciones. Para ello es fundamental la escucha activa y la empatía.
Pregunta antes de hablar o enjuiciar, ponte en “sus zapatos” y será entonces cuando reconoceremos los sentimientos del otro y podremos ayudarle.
- Cambia lo que dices porque te define. La mayoría de los fracasos en las relaciones personales tienen su base en una mala formulación de lo que comunicamos. Utiliza la asertividad, que es una forma de actuar y de comunicarnos de forma eficaz
- Cambia tu actitud, teniendo en cuenta que los conflictos no son personales sino profesionales.
- Se objetivo: Escucha a las partes y los diferentes puntos de vista. Intentando llegar a un punto de cooperación en el que las dos partes ganen
- Dales tu apoyo: que sientan que su situación te interesa y genera un ambiente no amenazante
- No te conviertas en juez o terminarás siendo parte del conflicto